La crisis económica amenaza cada vez más con provocar una fractura
social. El número de personas en paro que no recibe ningún tipo de
prestación se ha disparado hasta niveles récord, según se desprende de
los datos publicados hoy por el Ministerio de Empleo. Sin contar los
beneficiarios del plan Prepara (la ayuda de 400 euros, de la que no hay
datos), ya hay más de dos millones de parados registrados que no reciben
prestación o subsidio de desempleo, algo que no ocurría desde hace casi
25 años. Si, además, se tiene en cuenta que existe un desfase de
aproximadamente un millón de parados entre los datos de Empleo y los de
la Encuesta de Población Activa (EPA), considerados más fiables, habría cerca de tres millones de parados sin cobertura, una cifra sin precedentes en la historia económica española.
El índice que trata de medir el nivel de protección de los desempleados, la tasa de cobertura, ha caído hasta el 63,5%,
el nivel más bajo en seis años, con la diferencia de que ahora el
número de parados es más del doble que entonces. Esa tasa se calcula sin
contar a los parados que no tienen experiencia laboral previa, quienes,
por definición, no han cotizado para lograr prestaciones contributivas y
tampoco suelen reunir los requisitos para beneficiarse de subsidios.
La dureza de la crisis provoca que aunque el gasto en prestaciones crece y desborda las erróneas previsiones del Gobierno, cada vez son más los parados sin protección.
Según los datos del mes de septiembre publicados hoy por el Ministerio de Empleo,
ese mes había 2.836.592 beneficiarios de prestaciones, incluidos
143.388 perceptores del subsidio a trabajadores eventuales agrarios, que
no cuentan como parados. De esa cifra, 1.326.135 reciben la prestación
contributiva, a la que tienen derecho en función del tiempo en que se ha
cotizado. Otros 1.134.574 parados que no tienen derecho a prestación
perciben subsidios de desempleo. Finalmente, hay 232.495 parados que
reciben la renta activa de inserción, la ayuda de 426 euros.
De lo que no hay datos es de los beneficiarios del plan Prepara, la
ayuda de 400 euros cuyas condiciones de acceso se endurecieron y sobre
la que el Gobierno rechaza dar cifras. Esa ayuda se puso en marcha por
el anterior Gobierno precisamente para tratar de paliar los riesgos de
exclusión social que entraña la creciente cifra de parados sin ingresos.
La ayuda no está considerada como tal una prestación.
Con esa salvedad del plan Prepara, y descontando los beneficiarios
del subsidio agrícola (que no se incluyen en la cifra de parados) había,
por tanto, 2.693.204 parados con ayudas sobre un total
de 4.705.279 parados registrados ese mes en los servicios públicos de
empleo. La diferencia arroja esos más de dos millones de parados sin
prestaciones, una cifra en la que están incluidos unos 378.000 parados
sin empleo anterior. De ese total habría que descontar los beneficiarios
del plan Prepara, que rondaban los 200.000 la última vez que hubo datos
públicos.
Del otro lado, son muchos más los parados que no están inscritos en
los servicios públicos de empleo y no cobran prestación, según revela la
divergencia entre los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) y
la de las listas del paro. Tomando en cuenta ese millón de parados que
no se apunta en los registros, son cerca de tres millones los que no
tienen prestaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario