Prensa Latina
Grecia vivió ayer una jornada de
huelga general contra los nuevos recortes planeados por el ejecutivo de Antonis
Samarás, seguida por cientos de miles de trabajadores tanto del sector público
como del privado.
Segun la Confederación General de Trabajadores de Grecia (GSEE), el mayor
sindicato del país, el paro fue total en los astilleros, transporte marítimo y
refinerías, entre un 85 y un 90 por ciento en la industria pesada y la
construcción, mientras que en el sector servicios y la administración se llegó
al 80 por ciento.
Además la convocatoria fue secundada por primera vez por la Confederación General de Profesionales, Artesanos y Comerciantes, que agrupa la mayor parte del pequeño comercio, la cual denunció que las medidas de austeridad están acabando con sus establecimientos.
La huelga estuvo acompañada por una multitudinaria manifestación que colapsó durante horas las principales calles del centro de Atenas y en la que decenas de miles de personas corearon consignas contra el gobierno y la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), las medidas de austeridad y las políticas neoliberales.
Además la convocatoria fue secundada por primera vez por la Confederación General de Profesionales, Artesanos y Comerciantes, que agrupa la mayor parte del pequeño comercio, la cual denunció que las medidas de austeridad están acabando con sus establecimientos.
La huelga estuvo acompañada por una multitudinaria manifestación que colapsó durante horas las principales calles del centro de Atenas y en la que decenas de miles de personas corearon consignas contra el gobierno y la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), las medidas de austeridad y las políticas neoliberales.
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Algunos manifestantes mostraron a Prensa Latina su malestar por unos recortes que se ceban en los sueldos de la clase trabajadora y en las pensiones de jubilación, “la crisis capitalista está robando a los pobres para beneficiar a los más ricos”, explicó Sokratis, profesor de primaria. "El sueldo de los profesores ha descendido un 40 por ciento en los últimos meses, pero el principal problema es la altísima tasa de desempleo", aseguró. Hay muchas familias que no pueden aguantar más, "esto debe parar", y añadió que "esta no es la Europa de los pueblos, es la Europa del dinero".
En la misma línea se expresó Andonis, propietario de un comercio en la zona turística y hoy en huelga. “El problema es -dijo- que quienes más tienen son los que pagan menos impuestos y además se llevan el dinero del país”. Ataviado con una camiseta reivindicativa de la tercera república española se mostró proclive a la convocatoria de una huelga general "de una semana o de un mes, que nadie vaya a trabajar y veremos qué pasa". Para este pequeño empresario "la única solución es la revolución, no podemos continuar con un sistema capitalista que está acabando con los derechos de los pueblos”.
Por su parte Jristoforos Sumilas, presidente de la Asociación Panhelénica de Licenciados en Filología Hispánica, declaró que “la deuda es solo la excusa, pues el verdadero objetivo es acabar con todas las conquistas y los derechos logrados después de décadas de lucha”. Sumilas se mostró optimista al reconocer que los pueblos del sur de Europa están tomando conciencia de la situación y aprendiendo a organizarse. Añadió que "el programa de recortes no conduce a nada", que los países de Latinoamérica "lo saben mejor que nosotros" porque lo sufrieron en década anteriores y que "los ejemplos de Argentina, de Venezuela y de Bolivia nos muestran el camino".
Una de esas conquistas amenazadas es el sistema estatal de salud y sobre el que advirtió Ruth, doctora en un hospital público, que “los centros carecen de los materiales más básicos y la única solución para mantener la atención universal y gratuita es acabar con las medidas de austeridad”.
La manifestación se vio interrumpida durante casi una hora por enfrentamientos entre unidades de policías antidisturbios y un grupo de encapuchados que lanzaron a los uniformados bengalas y artefactos incendiarios en las inmediaciones del Parlamento.
Algunos manifestantes mostraron a Prensa Latina su malestar por unos recortes que se ceban en los sueldos de la clase trabajadora y en las pensiones de jubilación, “la crisis capitalista está robando a los pobres para beneficiar a los más ricos”, explicó Sokratis, profesor de primaria. "El sueldo de los profesores ha descendido un 40 por ciento en los últimos meses, pero el principal problema es la altísima tasa de desempleo", aseguró. Hay muchas familias que no pueden aguantar más, "esto debe parar", y añadió que "esta no es la Europa de los pueblos, es la Europa del dinero".
En la misma línea se expresó Andonis, propietario de un comercio en la zona turística y hoy en huelga. “El problema es -dijo- que quienes más tienen son los que pagan menos impuestos y además se llevan el dinero del país”. Ataviado con una camiseta reivindicativa de la tercera república española se mostró proclive a la convocatoria de una huelga general "de una semana o de un mes, que nadie vaya a trabajar y veremos qué pasa". Para este pequeño empresario "la única solución es la revolución, no podemos continuar con un sistema capitalista que está acabando con los derechos de los pueblos”.
Por su parte Jristoforos Sumilas, presidente de la Asociación Panhelénica de Licenciados en Filología Hispánica, declaró que “la deuda es solo la excusa, pues el verdadero objetivo es acabar con todas las conquistas y los derechos logrados después de décadas de lucha”. Sumilas se mostró optimista al reconocer que los pueblos del sur de Europa están tomando conciencia de la situación y aprendiendo a organizarse. Añadió que "el programa de recortes no conduce a nada", que los países de Latinoamérica "lo saben mejor que nosotros" porque lo sufrieron en década anteriores y que "los ejemplos de Argentina, de Venezuela y de Bolivia nos muestran el camino".
Una de esas conquistas amenazadas es el sistema estatal de salud y sobre el que advirtió Ruth, doctora en un hospital público, que “los centros carecen de los materiales más básicos y la única solución para mantener la atención universal y gratuita es acabar con las medidas de austeridad”.
La manifestación se vio interrumpida durante casi una hora por enfrentamientos entre unidades de policías antidisturbios y un grupo de encapuchados que lanzaron a los uniformados bengalas y artefactos incendiarios en las inmediaciones del Parlamento.
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Según fuentes policiales hubo un centenar de detenciones, la mayor parte de los cuales fueron liberados con posterioridad, tres manifestantes requirieron atención hospitalaria y ocho policías resultaron heridos en los enfrentamientos.
Pese a todo la marcha continuó pasados los disturbios pues una parte importante de la misma se había quedado cortada a la entrada de la plaza de Sintagma, entre otros grupos el formado por los militantes de la Coalición de Izquierda Radical (Syriza), primera fuerza opositora en la Asamblea Nacional.
Según fuentes policiales hubo un centenar de detenciones, la mayor parte de los cuales fueron liberados con posterioridad, tres manifestantes requirieron atención hospitalaria y ocho policías resultaron heridos en los enfrentamientos.
Pese a todo la marcha continuó pasados los disturbios pues una parte importante de la misma se había quedado cortada a la entrada de la plaza de Sintagma, entre otros grupos el formado por los militantes de la Coalición de Izquierda Radical (Syriza), primera fuerza opositora en la Asamblea Nacional.
Antonio Cuesta es corresponsal en Grecia de la agencia Prensa
Latina
Su blog de noticias es: http://deatenas.tumblr.com/
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del
autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para
publicarlo en otras fuentes.
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