El PA critica el uso de Beffa de su cargo en la Junta Municipal de Distrito.
“San Pablo no es su cortijo, debe aprender a respetar las normas democráticas.”
Tras las declaraciones del Presidente de la Junta Municipal de Distrito de San Pablo sobre nuestra supuesta “falta de solidaridad” en contra de lo que él considera “una barbarie”, queremos precisar lo siguiente:
En primer lugar indicar que somos los primeros interesados en que se renueve la actual Junta Municipal de Distrito, ya que como bien sabe, en la anterior no teníamos representación mientras que en la nueva sí. Ciertamente no entendemos el motivo del retraso en la constitución del Consejo dado que, aunque se modificara posteriormente el reglamento, bien podría ir funcionando el que saliera del actual.
Lo que no tenemos tan claro son los motivos por los que el Sr. Beffa quiere que se constituya tan rápidamente si él mismo ha mantenido paralizado al Consejo durante casi una década. ¿De qué sirve un consejo que apenas se reúne? Evidentemente sólo para propaganda de su presidente, que gusta de ir a todas partes luciendo sus “títulos nobiliarios”.
Mire Sr. Beffa, con lo que no podemos solidarizarnos en modo alguno es con el Cortijo en el que pretende usted convertir a este pueblo, con sus formas antidemocráticas que ha demostrado durante años incumpliendo reiterada y sistemáticamente ese reglamento del que tanto habla. Nosotros jamás apoyaremos un paso atrás para los derechos de los ciudadanos, como ha sido el que usted ha mantenido durante años con ese Consejo que ni se reunía y del que hasta han tenido que dimitir vocales por sus faltas de respeto. Nosotros siempre apoyaremos pasos adelante, siempre “pa’lante”, como ha pedido el pueblo de San Pablo en las urnas cuando ha reducido sus vocales a la mitad, dando la mayoría de vocales a otros partidos.
San Pablo y Jimena le han dicho ¡basta!, casi 200 vecinos le retiraron su confianza en las pasadas elecciones pero su sordera política, propiciada por décadas de chaqueteo y gobierno de rodillo nunca le ha permitido oir su voz. El Consejo de la Junta Municipal de Distrito se constituirá, esperamos que con este reglamento, y con las personas que el pueblo ha elegido más las que se elijan conforme al reglamento, de eso no nos cabe duda. La duda es si respetará usted como Presidente lo dispuesto por el reglamento o, como viene haciendo desde su constitución, se negará a convocarlo y respetar los derechos de los miembros no afines a su partido.
Reglamento que, por otro lado, ni siquiera su partido conoce, ya que, por lo que hemos visto publicado, no sólo no nombraron suplentes incumpliendo el art. 11 del Reglamento Regulador de la JMD, si no que tampoco identificaron a los vocales con lo que es de suponer que el Secretario del Ayuntamiento deberá imaginarse sus DNI y datos de contacto. Síntoma evidente de que jamás se han preocupado por el Reglamento ni mucho menos por cumplirlo.
Pero lo más grave no viene ahí, si no por el flagrante incumplimiento en la periodicidad de las sesiones ordinarias, único momento en el que los vocales de los restantes partidos (hasta ahora sólo uno del PP) podían controlar y fiscalizar sus actuaciones. Según el reglamento deberían convocarse seis al año, ¿y cuántas ha celebrado usted en los últimos ocho años?, ¿una o dos al año tal vez?... eso sí es un comportamiento antidemocrático que demuestra que no le mueve el buen funcionamiento de la JMD si no su afán por lucir títulos.
Además de ello, el inicio del procedimiento para constituir la JMD ha venido marcado por un enfrentamiento entre asociaciones provocado claramente por usted, por su afán en controlar la mayoría del Consejo. Ni que decir tiene que esto no habría pasado si se hubiera aprobado el reglamento propuesto en su día por el PA, y no el de su partido, aprobado con sus votos y no por la unanimidad que repite una y otra vez como si por repetir una mentira fuera a convertirse en verdad. En nuestro reglamento cada asociación tenía cabida, no se limitaba a un número para romper posibles mayorías políticas, como ocurre este año.
Tal vez algunos vecinos no se hayan dado cuenta de que el consejo pasará de estar constituido por 4 vocales del PSOE y 1 de la oposición a 2 del PSOE y 3 de la oposición, dependiendo del voto de la mayoría de las asociaciones (3 por los recortes impuestos por su partido) para tener su relajada mayoría absoluta.
Por si no fuera evidente el “chanchullo” que preparaba desde el día después de las elecciones, niegue que fue usted el promotor de un texto en el que las asociaciones seleccionadas pedían que no se tuviera en cuenta a ninguna que no constara en el Registro Municipal de Asociaciones. Algo absurdo teniendo en cuenta que ninguna presentó en fecha la documentación para estar legalmente inscrita y, por tanto, no habría representación válida para el Consejo.
Pero es que el colmo del absurdo llega cuando esas mismas asociaciones han tenido en cuenta a otras como vocales durante años que no estaban inscritas en ese registro… ¿por qué antes sí valían y ahora no?, ¿tal vez porque antes no necesitaba romper la mayoría de la oposición y ahora sí?... San Pablo no es un Cortijo, Sr. Beffa, y las mentiras tienen las patas muy cortas.
En todo caso, la cláusula que añadió su partido a la forma de elección de las Asociaciones, que forma parte del reglamento, también debería respetarse, y dado que no ha habido consenso corresponde al Alcalde designarlas. Algo con lo que usted, vista la cantidad de veces que ha incumplido el reglamento, por supuesto no estará de acuerdo.
Por todo ello, desde el Partido Andalucista estamos de acuerdo con la solicitud de constitución de la nueva Junta Municipal de Distrito, tanto como con que es imprescindible un cambio en el modo de funcionamiento de la misma, de modo que un partido no pueda ningunear al Consejo negándose a convocar las sesiones ordinarias, privando a los legítimos representantes del pueblo de sus derechos, sólo porque su objetivo sea únicamente ir de foto en foto con su título de presidente. Los órganos representativos de un pueblo no pueden estar de rodillas a los intereses de un partido o, como ocurre en San Pablo, de una sóla persona agarrada a su último reducto de poder.
Además de ello, entendemos que el Consejo de la Junta Municipal de Distrito debe ser el órgano soberano de gobierno, transmitiendo de forma transparente a los ciudadanos su funcionamiento y acuerdos adoptados, así como respetando de modo escrupuloso cualquier reglamento actual o futuro en vigor.
San Pablo no es un Cortijo, y nadie, ya sea de aquí o de fuera, debe utilizar a sus vecinos como escudos humanos para saciar sus ansias de poder.
Tras las declaraciones del Presidente de la Junta Municipal de Distrito de San Pablo sobre nuestra supuesta “falta de solidaridad” en contra de lo que él considera “una barbarie”, queremos precisar lo siguiente:
En primer lugar indicar que somos los primeros interesados en que se renueve la actual Junta Municipal de Distrito, ya que como bien sabe, en la anterior no teníamos representación mientras que en la nueva sí. Ciertamente no entendemos el motivo del retraso en la constitución del Consejo dado que, aunque se modificara posteriormente el reglamento, bien podría ir funcionando el que saliera del actual.
Lo que no tenemos tan claro son los motivos por los que el Sr. Beffa quiere que se constituya tan rápidamente si él mismo ha mantenido paralizado al Consejo durante casi una década. ¿De qué sirve un consejo que apenas se reúne? Evidentemente sólo para propaganda de su presidente, que gusta de ir a todas partes luciendo sus “títulos nobiliarios”.
Mire Sr. Beffa, con lo que no podemos solidarizarnos en modo alguno es con el Cortijo en el que pretende usted convertir a este pueblo, con sus formas antidemocráticas que ha demostrado durante años incumpliendo reiterada y sistemáticamente ese reglamento del que tanto habla. Nosotros jamás apoyaremos un paso atrás para los derechos de los ciudadanos, como ha sido el que usted ha mantenido durante años con ese Consejo que ni se reunía y del que hasta han tenido que dimitir vocales por sus faltas de respeto. Nosotros siempre apoyaremos pasos adelante, siempre “pa’lante”, como ha pedido el pueblo de San Pablo en las urnas cuando ha reducido sus vocales a la mitad, dando la mayoría de vocales a otros partidos.
San Pablo y Jimena le han dicho ¡basta!, casi 200 vecinos le retiraron su confianza en las pasadas elecciones pero su sordera política, propiciada por décadas de chaqueteo y gobierno de rodillo nunca le ha permitido oir su voz. El Consejo de la Junta Municipal de Distrito se constituirá, esperamos que con este reglamento, y con las personas que el pueblo ha elegido más las que se elijan conforme al reglamento, de eso no nos cabe duda. La duda es si respetará usted como Presidente lo dispuesto por el reglamento o, como viene haciendo desde su constitución, se negará a convocarlo y respetar los derechos de los miembros no afines a su partido.
Reglamento que, por otro lado, ni siquiera su partido conoce, ya que, por lo que hemos visto publicado, no sólo no nombraron suplentes incumpliendo el art. 11 del Reglamento Regulador de la JMD, si no que tampoco identificaron a los vocales con lo que es de suponer que el Secretario del Ayuntamiento deberá imaginarse sus DNI y datos de contacto. Síntoma evidente de que jamás se han preocupado por el Reglamento ni mucho menos por cumplirlo.
Pero lo más grave no viene ahí, si no por el flagrante incumplimiento en la periodicidad de las sesiones ordinarias, único momento en el que los vocales de los restantes partidos (hasta ahora sólo uno del PP) podían controlar y fiscalizar sus actuaciones. Según el reglamento deberían convocarse seis al año, ¿y cuántas ha celebrado usted en los últimos ocho años?, ¿una o dos al año tal vez?... eso sí es un comportamiento antidemocrático que demuestra que no le mueve el buen funcionamiento de la JMD si no su afán por lucir títulos.
Además de ello, el inicio del procedimiento para constituir la JMD ha venido marcado por un enfrentamiento entre asociaciones provocado claramente por usted, por su afán en controlar la mayoría del Consejo. Ni que decir tiene que esto no habría pasado si se hubiera aprobado el reglamento propuesto en su día por el PA, y no el de su partido, aprobado con sus votos y no por la unanimidad que repite una y otra vez como si por repetir una mentira fuera a convertirse en verdad. En nuestro reglamento cada asociación tenía cabida, no se limitaba a un número para romper posibles mayorías políticas, como ocurre este año.
Tal vez algunos vecinos no se hayan dado cuenta de que el consejo pasará de estar constituido por 4 vocales del PSOE y 1 de la oposición a 2 del PSOE y 3 de la oposición, dependiendo del voto de la mayoría de las asociaciones (3 por los recortes impuestos por su partido) para tener su relajada mayoría absoluta.
Por si no fuera evidente el “chanchullo” que preparaba desde el día después de las elecciones, niegue que fue usted el promotor de un texto en el que las asociaciones seleccionadas pedían que no se tuviera en cuenta a ninguna que no constara en el Registro Municipal de Asociaciones. Algo absurdo teniendo en cuenta que ninguna presentó en fecha la documentación para estar legalmente inscrita y, por tanto, no habría representación válida para el Consejo.
Pero es que el colmo del absurdo llega cuando esas mismas asociaciones han tenido en cuenta a otras como vocales durante años que no estaban inscritas en ese registro… ¿por qué antes sí valían y ahora no?, ¿tal vez porque antes no necesitaba romper la mayoría de la oposición y ahora sí?... San Pablo no es un Cortijo, Sr. Beffa, y las mentiras tienen las patas muy cortas.
En todo caso, la cláusula que añadió su partido a la forma de elección de las Asociaciones, que forma parte del reglamento, también debería respetarse, y dado que no ha habido consenso corresponde al Alcalde designarlas. Algo con lo que usted, vista la cantidad de veces que ha incumplido el reglamento, por supuesto no estará de acuerdo.
Por todo ello, desde el Partido Andalucista estamos de acuerdo con la solicitud de constitución de la nueva Junta Municipal de Distrito, tanto como con que es imprescindible un cambio en el modo de funcionamiento de la misma, de modo que un partido no pueda ningunear al Consejo negándose a convocar las sesiones ordinarias, privando a los legítimos representantes del pueblo de sus derechos, sólo porque su objetivo sea únicamente ir de foto en foto con su título de presidente. Los órganos representativos de un pueblo no pueden estar de rodillas a los intereses de un partido o, como ocurre en San Pablo, de una sóla persona agarrada a su último reducto de poder.
Además de ello, entendemos que el Consejo de la Junta Municipal de Distrito debe ser el órgano soberano de gobierno, transmitiendo de forma transparente a los ciudadanos su funcionamiento y acuerdos adoptados, así como respetando de modo escrupuloso cualquier reglamento actual o futuro en vigor.
San Pablo no es un Cortijo, y nadie, ya sea de aquí o de fuera, debe utilizar a sus vecinos como escudos humanos para saciar sus ansias de poder.
Noticia leida y publicada con anterioridad por Tiojimeno.
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