EVASIÓN DE CAPITALES (163.185,9 MILLONES EN LO QUE VA DE AÑO). Despues dicen que estamos en crisis despertemos ya y digamos basta.

La noticia difundia por www.elconfidencial.com  refleja que los capitales no tienen patria. Mientras al pueblo se le somete a una mayor presión fiscal, recortes de derechos y salarios, los grandes capitalistas, sean de nacionalidad española o foránea, ponen su dinero a buen recaudo. Ni la indecente amnistía fiscal ha servido para nada. El Gobierno, mientras, nos dice que no mete mano a los ricos porque fomentaría la salida de España de las grandes fortunas. Sin embargo, a pesar del trato de favor que recibe la clase capitalista, atemorizado por la más que posible convulsión económica de España y su intervención, más la cada vez más probable la quiebra del euro, huyen como lobos hambrientos, con la avaricia inherente a esta clase social, a trasladar sus capitales a “paraísos seguros”.

El Gobierno se queda sin argumentos, no controla el devenir de la economía española porque acepta la pérdida de soberanía y sigue los dictados de una, cada vez más clara, dictadura de los mercados especuladores. En el contexto de globalización que vivimos el sistema produce una contradicción esencial: la soberanía de los pueblos frente a la inercia centralizadora del capitalismo internacional en esta fase imperialista.

Defender el presente y el futuro de España, no consiste en favorecer las corridas de toros, convertirse en un fanático de las selecciones deportivas ni hablar en primera persona del plural cuando se cita a Repsol o cualquier otra gran empresa, por muy español que sea su nombre. Tampoco es la defensa radical que el Gobierno hace gala de los bancos, multinacionales y poderes económicos, supuestamente españoles.

Defender el presente y el futuro de este país, desde una perspectiva justa, social y progresista, se basa en la defensa de sus ciudadanos, su bienestar, sus derechos esenciales y su soberanía, con respecto a centros de poder foráneos, estén localizados estos en Europa, en EEUU o donde sea. Y se expresa también en la solidaridad con otros pueblos. La política internacional de Rajoy se mueve al dictado del imperialismo noerteamericano y las oligarquías financieras.

Estamos comenzando a pagar las consecuencias porque aún pueden ser más, de las políticas neoliberales del bipartidismo español. No parece que el Gobierno tenga intención de dar marcha atrás en su vorágine capitalista salvaje. En ese sentido, la llamada de la izquierda española a la rebelión ciudadana debe constituir el principio para la organización y la movilización popular, que tenga como objetivo la dimisión del Gobierno y la apertura de un Proceso Constituyente que de paso a la construcción de una República Socialista en España, a la que no le faltarían grandes y dignos aliados, en América Latina singularmente, pero también en la relación de Estados soberanos que no siguen el dictado del gran capital internacional.

Mientras millones de personas sufren el desempleo, los pensionistas la congelación de sus retribuciones, los funcionarios el recorte en sus salarios, los ciudadanos el aumento de la presión fiscal, no sólo con la subida del IVA, sino las rentas del trabajo. Mientras la mayoría de los españoles que constituye la clase trabajadora del país sufre las consecuencias de una crisis que no ha creado, los causantes de la misma, hacen agosto y trasladan sus fortunas a otros lugares. 

¿ Qué próxima agresión al pueblo va a aprobar el Gobierno de Rajoy a la economía, los derechos y libertades de los ciudadanos?

No debemos aceptar la realidad política que nos ha tocado vivir, las consecuencias injustas de políticas neoliberales que la mayoría del pueblo rechaza. Hay que rebelarse, movilizarse, organizarse en la lucha contra este sistema. Esos que trasladan sus fortunas son los mismos que mueven los hilos del poder actual.