Araujo opta por negociar la plantilla con los sindicatos a través de la RPT, Romero pretende equilibrar el gasto salarial despidiendo a 178 trabajadores a través de un ERE o la amortización de plazas.
Seis meses del inicio del mandato. Hoy se cumple medio año desde que los nuevos alcaldes tomaron posesión de sus cargos. Un semestre marcado, en el caso de La Línea y Los Barrios, por el colapso financiero de sus respectivos erarios que condicionan la acción de gobierno y quiebran la paz social por los retrasos en el pago de las nóminas.
La linense Gemma Araujo (PSOE) y el barreño Jorge Romero (PA) heredaron dos lánguidas haciendas municipales que unen a ambas localidades con el retraso en el pago de los salarios como nexo. Pero los caminos de ambos mandatarios se bifurcan cuando se atiende a las fórmulas y tiempos empleados para buscar soluciones a la tesitura común. Mientras Gemma Araujo ha optado por buscar un crédito de legislatura que aún no está cerrado, Jorge Romero ha puesto sobre la mesa un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERE) para despedir a 178 trabajadores municipales.
Para llegar a ambos extremos, La Línea y Los Barrios sí han efectuado por paradas intermedias en el viaje común: la disolución de empresas municipales y el consabido apretón al cinturón. La disolución de la Sociedad Municipal de Comunicación de La Línea, con 21 empleados, cuyo ERE aún no ha sido concluido, ha sido uno de los pasos dados en estos primeros seis meses por Araujo y será disuelta la sociedad del matadero. El equipo de gobierno aprobó en pleno la amortización de 14 plazas y ha recortado gastos en personal con reducciones en complementos. Además, una de las primeras medidas que aprobó Araujo fue la de reducir el coste del equipo de gobierno en un 70% respecto al PP.
En Los Barrios han sido cuatro las empresas disueltas (Iniciativas, GAMA, Radiotelevisión Los Barrios -ésta a través de un ERE- y Recaudación municipal), con 58 trabajadores despedidos hasta el momento y la derogación del convenio colectivo y complementos.
Pero estos primeros recortes no parecen ser suficientes para alcanzar la estabilidad económica. En La Línea, a los trabajadores municipales se les deben cinco nóminas en el caso de los funcionarios y seis en el de los laborales, unos impagos que suman más de ocho millones de euros. Pronto se puede añadir la extraordinaria de Navidad. Cuando Araujo llegó a la Alcaldía se debían la nómina de mayo y la extraordinaria de Navidad. Con dificultades, el nuevo equipo de gobierno pudo pagar la 'extra de Navidad' y las nóminas íntregras de junio y septiembre. De la de agosto queda un pico y la mitad de la de julio. Tampoco se ha abonado la extraordinaria de verano y siguen pendientes la mitad de dos pagas extraordinarias de los laborales. Araujo no ha podido sacar adelante el crédito de legislatura (2,5 millones de euros) y sigue pendiente de recibir una respuesta afirmativa para un préstamo de 1,3 millones avalado por la Diputación de Cádiz mediante una Orden Irrevocable de Pago. Las retenciones de la PIE siguen siendo del 100% y la Patrica continúa comprometida. Además, la Diputación adelantó al Ayuntamiento cuando gobernaba el PP los tributos municipales hasta el próximo mes de marzo.
Los trabajadores barreños tienen pendiente de pago la mitad del sueldo de septiembre, octubre y noviembre así como la extra de navidad. Romero también encontró dos nóminas impagadas cuando tomó entre sus manos el bastón de mando. Optó por operaciones de crédito avaladas por la Diputación y los ingresos por una reclamación tributaria a Acerinox para pagar salarios. Los Barrios también tiene las transferencias de fondos del Estado (PIE) retenidas.
Llegados al punto del cierre del grifo crediticio, en La Línea se ha anunciado que la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), que supondrá importantes recortes en gastos de personal y despidos, ya está concluida, aunque queda negociarla con los sindicatos y darla a conocer al resto de partidos de la Corporación municipal. La actual situación ha provocado además que el Ayuntamiento lleve tres días paralizado por una asamblea permanente de los trabajadores debido al impago de sus salarios.
En Los Barrios, tras la presentación del ERE el 4 de noviembre y el cierre del periodo de consultas sin acuerdo con los sindicatos, la Junta tiene la palabra. Pero no la última puesto que hoy pasará por pleno el presupuesto municipal para 2012 que también prevé una amortización de plazas como plan B- en el caso de que la administración regional no avale los despidos. Será a través de la figura de una cuestión de confianza que ya fue presentada hace tres semanas pero que quedó en suspenso.
La linense Gemma Araujo (PSOE) y el barreño Jorge Romero (PA) heredaron dos lánguidas haciendas municipales que unen a ambas localidades con el retraso en el pago de los salarios como nexo. Pero los caminos de ambos mandatarios se bifurcan cuando se atiende a las fórmulas y tiempos empleados para buscar soluciones a la tesitura común. Mientras Gemma Araujo ha optado por buscar un crédito de legislatura que aún no está cerrado, Jorge Romero ha puesto sobre la mesa un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERE) para despedir a 178 trabajadores municipales.
Para llegar a ambos extremos, La Línea y Los Barrios sí han efectuado por paradas intermedias en el viaje común: la disolución de empresas municipales y el consabido apretón al cinturón. La disolución de la Sociedad Municipal de Comunicación de La Línea, con 21 empleados, cuyo ERE aún no ha sido concluido, ha sido uno de los pasos dados en estos primeros seis meses por Araujo y será disuelta la sociedad del matadero. El equipo de gobierno aprobó en pleno la amortización de 14 plazas y ha recortado gastos en personal con reducciones en complementos. Además, una de las primeras medidas que aprobó Araujo fue la de reducir el coste del equipo de gobierno en un 70% respecto al PP.
En Los Barrios han sido cuatro las empresas disueltas (Iniciativas, GAMA, Radiotelevisión Los Barrios -ésta a través de un ERE- y Recaudación municipal), con 58 trabajadores despedidos hasta el momento y la derogación del convenio colectivo y complementos.
Pero estos primeros recortes no parecen ser suficientes para alcanzar la estabilidad económica. En La Línea, a los trabajadores municipales se les deben cinco nóminas en el caso de los funcionarios y seis en el de los laborales, unos impagos que suman más de ocho millones de euros. Pronto se puede añadir la extraordinaria de Navidad. Cuando Araujo llegó a la Alcaldía se debían la nómina de mayo y la extraordinaria de Navidad. Con dificultades, el nuevo equipo de gobierno pudo pagar la 'extra de Navidad' y las nóminas íntregras de junio y septiembre. De la de agosto queda un pico y la mitad de la de julio. Tampoco se ha abonado la extraordinaria de verano y siguen pendientes la mitad de dos pagas extraordinarias de los laborales. Araujo no ha podido sacar adelante el crédito de legislatura (2,5 millones de euros) y sigue pendiente de recibir una respuesta afirmativa para un préstamo de 1,3 millones avalado por la Diputación de Cádiz mediante una Orden Irrevocable de Pago. Las retenciones de la PIE siguen siendo del 100% y la Patrica continúa comprometida. Además, la Diputación adelantó al Ayuntamiento cuando gobernaba el PP los tributos municipales hasta el próximo mes de marzo.
Los trabajadores barreños tienen pendiente de pago la mitad del sueldo de septiembre, octubre y noviembre así como la extra de navidad. Romero también encontró dos nóminas impagadas cuando tomó entre sus manos el bastón de mando. Optó por operaciones de crédito avaladas por la Diputación y los ingresos por una reclamación tributaria a Acerinox para pagar salarios. Los Barrios también tiene las transferencias de fondos del Estado (PIE) retenidas.
Llegados al punto del cierre del grifo crediticio, en La Línea se ha anunciado que la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), que supondrá importantes recortes en gastos de personal y despidos, ya está concluida, aunque queda negociarla con los sindicatos y darla a conocer al resto de partidos de la Corporación municipal. La actual situación ha provocado además que el Ayuntamiento lleve tres días paralizado por una asamblea permanente de los trabajadores debido al impago de sus salarios.
En Los Barrios, tras la presentación del ERE el 4 de noviembre y el cierre del periodo de consultas sin acuerdo con los sindicatos, la Junta tiene la palabra. Pero no la última puesto que hoy pasará por pleno el presupuesto municipal para 2012 que también prevé una amortización de plazas como plan B- en el caso de que la administración regional no avale los despidos. Será a través de la figura de una cuestión de confianza que ya fue presentada hace tres semanas pero que quedó en suspenso.
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