Diario de Cordoba.
Los profesores interinos andaluces van a sufrir la cara y la cruz de los recortes que inspirarán hoy la primera huelga general de todo el sector de la enseñanza: la Junta no aplicará la reducción.
Los profesores interinos andaluces van a sufrir la cara y la cruz de los recortes que inspirarán hoy la primera huelga general de todo el sector de la enseñanza: la Junta no aplicará la reducción.
Los profesores interinos andaluces van a sufrir la cara y la cruz de los recortes que inspirarán hoy la primera huelga general de todo el sector de la enseñanza: la Junta no aplicará la reducción del 15% de la jornada laboral, como hará en el resto de la Administración. Esta decisión compensa en parte el efecto que tendrá una de las medidas de ahorro aprobadas por el Gobierno central: el aumento del horario lectivo de 18 a 20 horas para los profesores de Secundaria. La consejera de Educación, Mar Moreno, explicó ayer a los sindicatos del sector que la Junta no encuentra el modo de sortear esta orden "obligatoria". Andalucía la va a recurrir ante el Tribunal Constitucional, pero hasta que resuelva, Moreno confirmó que 4.827 docentes de instituto cesarán en septiembre.
La comunidad educativa andaluza apoya la protesta de hoy que, además, cuenta con la inusual afinidad de la Junta. Es la primera vez que desde la Consejería de Educación se envía un mensaje cómplice con una manifestación de profesores que va a causar un perjuicio y una parálisis de las escuelas andaluzas. Inicialmente la huelga fue convocada contra los recortes del Gobierno, pero en los últimos días los sindicatos de profesores han girado sus pancartas contra la Junta y sus medidas de ahorro.
El plan de reequilibrio financiero de Andalucía busca "preservar el sistema educativo y el empleo público". Por ejemplo, no se aumentará la ratio de 25 a 30 alumnos por aula en Primaria, y de 30 a 35 en ESO. Hacerlo habría supuesto prescindir de 2.672 interinos. Sin embargo, el mayor golpe del plan de ajustes a la educación viene dado por el recorte en la partida de las nóminas en la administración (777 millones).
TASA DE INTERINOS Moreno explicó a los sindicatos que una de las medidas de más impacto en el plan no será de aplicación en la enseñanza. Para evitar socavar el empleo público, la Junta diseñó una estrategia consistente en recortar un 5% de media el sueldo de los funcionarios y reducir un 15% la jornada laboral (y el salario) de eventuales. Era un mal menor, preferible a prescindir de 30.000 trabajadores en la Administración, que es lo que habría pasado si la Junta hubiera decidido aplicar a rajatabla el aumento de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas, impuesto por el Gobierno. Hacienda confirmó la semana pasada que la minoración del horario y sueldo de interinos afectaría a toda de la Administración, incluido sanidad y educación, sectores que acaparan casi el 90% del personal eventual en la Junta. La enseñanza es el sector con una tasa de interinos más elevada (10%) después de salud (17%).
En la actualidad hay 13.500 docentes sin plaza fija en activo. El Gobierno no aplicará el recorte a este colectivo debido a la "enorme complejidad técnica" que supondría cuadrar las plantillas en los colegios si cada interino pierde un 15% de su horario. La contrapartida es que el sistema perderá a 4.827 interinos de Secundaria en septiembre por el aumento de la jornada lectiva. Un centro de ESO con una plantilla de 50 profesores (el más común), perderá de media cinco docentes.
Esta es la primera cifra de recorte de personal que se da por hecha en el Gobierno andaluz. Aunque en Educación barajan un techo de recortes de interinos próximo a los 10.000 docentes, derivados de la aplicación de los ajustes del Gobierno: la no cobertura de las bajas médicas antes de diez días ya ha empezado a funcionar. Esta medida supone la "no contratación" de personal para bajas (ahora hay 3.789 sustitutos). La congelación de la oferta de empleo y la imposibilidad de cubrir más del 10% de las vacantes de jubilados afecta a otras 3.277 plazas, puestos que ahora están ocupando interinos, pero que Educación no garantiza que se mantentan en septiembre, según los sindicatos asistentes.
ELIMINAR PROGRAMAS Los sindicatos CSIF, CCOO, UGT, ANPE y Ustea rechazan de plano la reducción del 5% del salario de los funcionarios docentes (entre 1.100 y 2.500 euros de media). Los sindicatos proponen otras medidas: que se eliminen programas "poco efectivos" como el Plan de Calidad (187 millones en cuatro años), el de Cultura Emprendedora (93 millones) o que se empiece a modular algunos servicios que ahora son gratuitos en función de la renta (libros de texto, ordenadores, centros bilingües...)
El mensaje de la huelga de hoy es sencillo: "Paralizar las escuelas es paralizar el país".
No hay comentarios:
Publicar un comentario